El director de la Semana de Música Religiosa (SMR), Cristóbal Soler ha recibido el Premio Ciudad de Cuenca en la Categoría Artística que le será entregado el próximo día 16 en el acto del pregón de la Feria de San Julián.
La Junta de Gobierno Local ha aprobado esta concesión con la que se pretende reconocer y agradecer su aportación a la ciudad, de aquellas personas que se han destacado en diversos ámbitos sociales, culturales y artísticos.
El alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal ha destacado la contribución de Soler a la consolidación de la SMR como referente musical y cultural, siendo el festival de música religiosa más importante de España y del mundo, con 57 ediciones celebradas; así como su mantenimiento de la calidad de la programación ofrecida, lo que le ha llevado a ser considerada ‘Insignia Cultural de Castilla-La Mancha’ por el Observatorio de la Cultura.
En palabras de Mariscal, Soler es una de las grandes incorporaciones a la cultura de Cuenca de los últimos años, suponiendo un revulsivo para la SMR que ha cosechado importantes éxitos de público y de repercusión mediática.
“Con este reconocimiento se pone en valor su implicación con la ciudad y con sus instituciones, porque ha hecho mucho más de lo que se espera de un director artístico de la Semana de Música Religiosa”, ha dicho el primer edil.
Soler es director artístico de la Semana de Música Religiosa de Cuenca desde 2016, nombrado por su currículum, trayectoria profesional y por la calidad de su proyecto artístico. La 57 edición de la SMR ha creado sinergias con la ciudad, con sus espacios monumentales, instituciones y habitantes. A ello ha sumado conferencias, ensayos musicales y masterclass, contribuyendo a mantener el reconocimiento de uno de los festivales de música religiosa más antiguo y con mayor prestigio del panorama no sólo nacional sino también internacional.
Soler, ha logrado un modelo sostenible de programación que mantiene el equilibrio entre una tradición de más de medio siglo de existencia y las nuevas aportaciones. La más destacada: la creación de la Academia SMR, que conforman el coro, orquesta y solistas de la SMR permanente en bajada cultural del festival, logrando en las ediciones que ha estado al frente los mayores éxitos de públicos y repercusión mediática.
A través de ella se forma en la excelencia a jóvenes músicos que estén finalizando o hayan terminado los estudios superiores, creando un eslabón fundamental al mundo de la música.
Para Mariscal este premio supone el reconocimiento a una de las grandes incorporaciones al mundo de la cultura de Cuenca que ha supuesto un gran revulsivo al festival de música sacra de la ciudad y que va más allá de lo que se espera la dirección artística de la SMR, por su implicación con la ciudad y sus instituciones.