Las máquinas han comenzado a derribar esta mañana el muro que separa el Paseo San Antonio de los terrenos de ADIF, en la capital conquense, como paso previo a la limpieza de esta zona para continuar avanzando en la integración urbanística en la ciudad de Cuenca, contemplada dentro del Plan XCuenca.
Las actuaciones que contemplan los trabajos recogidos en el primer convenio de ADIF, con una inversión de más de 2,1 millones de euros recogen el acondicionamiento y limpieza de los terrenos ferroviarios desde la calle Diego Jiménez hasta la Ronda Oeste.
Trabajos a los que seguirá la creación de un aparcamiento entre el Paseo del Ferrocarril y la calle Orégano, con 300 plazas, y en la zona de Casablanca con 65.
Asimismo, se realizarán rotondas y viales de conexión en la calle Diego Jiménez, y zonas deportivas en el entorno de las calles Orégano y Álvaro de Luna.
DÍA "HISTÓRICO" PARA DOLZ
El alcalde de la ciudad, Darío Dolz, ha destacado que “por fin” se está empezando a romper la brecha “que tantos años lleva dividiendo Cuenca”. Por lo que, ante las preguntas de los medios, no ha dudado el calificar este miércoles como un día “histórico” con el inicio de estos trabajos.
Según ha especificado, ahora se va a derribar el muro que transcurre en el Paseo San Antonio, para continuar después con el que transcurre por la parte de Álvaro de Luna.
Al mismo tiempo, operarios de Tragsa ya llevan varias semanas limpiando y retirando elementos inservibles en estos terrenos ferroviarios y ha recordado Dolz que este es un proyecto que va a transgredir varias legislaturas.
El derribo de esta parte del muro no va a afectar al tránsito de vehículos de esta vía ni al de personas, salvo la zona de seguridad que se ha habilitado.