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La bicicleta como herramienta de concienciación sostenible

Distintas asociaciones y clubes luchan por aumentar su uso para hacer de Cuenca un lugar más respetuoso con el ambiente
Fotos: Mario Gómez
14/09/2019 - Mario Gómez

Durante todo el año, pero más aún con el buen tiempo, es habitual ver cada vez a más conquenses moverse libremente por la ciudad usando la bicicleta. Un sistema de transporte saludable, limpio y respestuoso con el medio ambiente, que ayuda a descongestionar el tráfico de la capital conquense. Se trata de una elección que cuenta con numerosos apoyos en forma de asociaciones, clubes o iniciativas que impulsan de manera desinteresada esta alternativa.

Uno de los puntos de referencia para la persona que se quiere mover por Cuenca en bicicleta es el taller de Recicleta, ubicado en el Paseo del Júcar, en el barrio de San Antón, y que supone una referencia para los visitantes de la ciudad que quieren hacerse con uno de estos vehículos. Gestionado desde hace más de una década por Antonio López, Lorenzo Gallego y Jesús Guijarro. Se trata de un lugar social que está abierto a todos los públicos que deseen arreglar por sí mismos su bicicleta o alquilar una por una temporada.

“Somos un taller social de bicicletas, autoreparación y alquiler de bicicletas, así como organizar actividades para el fomento de su uso”, indica Lorenzo que señala que la actividad que realizan “es totalmente voluntaria, abrimos el taller varios días y nos coordinamos por el grupo de facebook, algo que nos sirve para recibir a gente de todo el mundo que viene a Cuenca y necesita una bicicleta”.

"Es necesaria la sensibilización, y para eso hay que hacer más accesible la bicicleta”

El taller, en expansión desde 2015, cuenta con herramientas y piezas necesarias para sus socios (que pagan una cuota simbólica de dos euros por año) puedan arreglar o mantener ellos mismos sus bicis. De igual manera, la fórmula del reciclaje y la autosuficiencia la llevan al día, recogiendo bicicletas que la gente tira a la basura. “Si podemos las arreglamos, sino aprovechamos todos los componentes que se pueda”

Por otro lado, los números de su servicio de alquiler hablan por sí solos: unas 90 bicicletas actualmente y más de 350 desde 2015 y un movimiento de unas 15 personas a la semana. “Hablamos de poder moverte en bicicleta durante todo un año por la ciudad con una fianza de 30 euros, de los que se te devuelven 15. Todo aquel que quiera moverse por Cuenca en bici, lo tiene alcance de la mano”, explica Antonio.

Su labor abarca actividades con Aldeas Infantiles, la escuela Waldorf y otras asociaciones a las que ceden bicicletas y enseñan a los más pequeños cómo funcionan. “En Cuenca, el perfil del usuario del ciclista suele ser el que coge la bici el fin de semana para hacer ruta, como transporte por la ciudad no es lo habitual, si bien en el ámbito universitario cambia drásticamente el tema. La DGT señala que la mayoría de desplazamientos de menos de 5 kilómetros que se hacen son en coche, en una ciudad como la nuestra eso es una barbaridad, es necesaria una sensibilización, y para eso hay que hacer accesible la bicicleta, esa es nuestra idea”. afirma Lorenzo.

Miguel López-Caniego: “Hay mentalidad sana, pero se debe dar un paso más”
La bicicleta como herramienta de concienciación sostenible

‘Cuenca en Bici’ nació hace más de una década para impulsar la figura de este transporte en la ciudad. Tras varios años ganando terreno, la asociación ha entrado en un punto muerto a la espera de savia nueva que “vuelva a convencer a los agentes sociales la importancia de la bicicleta en la ciudad”, declara Miguel López-Caniego, presidente de la asociación. Para este defensor del transporte limpio, la implicación de las administraciones sigue siendo el salto necesario que necesita Cuenca para mejorar su situación con la bicicleta.

“En trece años de trato con diferentes equipos de Gobierno, el 95% coincidía en la importancia de la bicicleta para la ciudad, pero no se hacía nada”. Esta situación desgastó la iniciativa hasta dejarla en letargo. “Las puertas están abiertas y la asociación constituida, si hay gente interesada en continuar esta labor, tendrán nuestra colaboración como voluntarios, mientras tanto, lo que yo puedo hacer es seguir moviéndome en bici, porque si hay algo que da seguridad a los ciclistas, es que haya muchos ciclistas”, indica Miguel.

Pese a todo, destaca el avance realizado por esta asociación que desde primera hora tuvo un objetivo claro “una ciudad con menos humo, donde se pudiera pasear tranquilamente y moverse de forma limpia”.

En su labor a través de los años han defendido el papel del ciclista pero también el de peatón, teniendo como encrucijada el asunto de Carretería en el que esta asociación ideó una campaña para presentarla al ayuntamiento que nunca vio la luz: “Planificamos folletos para concienciar y educar al ciclista del paso por Carretería a una velocidad amable, no más de 10 km/h, y la alternativa de las calles colindantes en caso de ir más rápido, pero al prohibir ese paso, pasa el que menos tiene que pasar, dañando la imagen del buen ciclista”.

En cuanto a las barreras orográficas de la ciudad, Miguel pone de ejemplo lo puesto en marcha en otras ciudades: “Si analizamos la ciudad, la parte baja es bastante sorteable, pero si querremos subir al Casco Antiguo, la solución son portabicis en los autobuses”. De esta forma, insiste, es la que hace dar pasos en la buena dirección. “Hace años te pitaban por ir en bici, ahora se respeta cada vez más al ciclista, el conductor debe entender que el hecho de que yo me mueva en bici significa que le estoy cediendo un espacio para aparcar, menos tráfico, menos humo en la ciudad”, añade.
Mientras tanto, Cuenca en bici sigue a la espera de nuevos defensores del movimiento que conciencien a los agnósticos de las oportunidades de este transporte “no sólo en ciudad, sino también en carretera y en mountain bike”.

Ángel Bejarano: “Cuenca es un diamante en bruto para la bicicleta”
La bicicleta como herramienta de concienciación sostenible

Ángel Bejarano es el presidente de uno de los clubes más importantes de la Cuenca ciclista, el Sendas de Cuenca. Este amante tanto de la montaña como de la carretera reconoce la importante barrera que tiene la ciudad a la hora de adaptarse a la movilidad sobre dos ruedas: “Tenemos un problema de orografía, pero a diferencia de hace unos años cuando se implantaron las bicicletas de alquiler, pienso que ahora, gracias a la tecnología, las bicicletas eléctricas solucionarían eso”. Sin embargo, debería ahondarse en otros focos de actuación como una mayor infraestructura del carril bici, dado que considera que es “una lástima tener el carril bici que no llegue hasta la universidad, o siga hasta San Antón para conectarte con el centro de la ciudad, o que la bicicleta sea el único vehículo que esté prohibido que circule por Carretería”. En este aspecto, Ángel señala que el ciclista también debe poner de su parte “mediante educación y corrección de conductas que sean peligrosas para los peatones, pero nunca prohibir”, indica.

Así, el objetivo es ampliar la cultura de la bici con actividades que ya se hacían anteriormente, como el día de la bici, que el propio Ángel recuerda como “una auténtico día festivo y de convivencia”, o las que ya practican algunos colegios de la capital como el realizar el camino al centro en bicicleta.

UN TESORO DORMIDO
Respecto a las oportunidades que puede otorgar la bicicleta al desarrollo de la capital y la provincia, el presidente del Sendas de Cuenca lo tiene claro: “Cuenca es un auténtico diamante en bruto que, mediante el deporte y el medio ambiente, supondría un potencial económico brutal y sostenible”.

Desde su punto de vista, se cuenta con el elemento “más difícil y que no se puede comprar, el entorno y el terreno. Tenemos una extensión de bosques y montaña espectactular y sin alejarnos de una ciudad que está en el centro de la península y con buena conexión e instalación hotelera, pero es necesario la implicación de iniciativa privada y administraciones para hacerlo posible”. Además, en carretera, Ángel subraya la característica que cuenta con “buenas vías y con muy poco tráfico”.
Por todo ello, cree ideal que Cuenca sea escenario de más pruebas como la que celebraron el pasado domingo, la IV Maratón MTB Sendas de Cuenca.