El Ayuntamiento de Cuenca aceptaba el jueves en pleno con los votos a favor de PP, PSOE e IU y la abstención de Ciudadanos la donación propuesta por Gustavo Torner de una serie de obras de este artista valoradas en 1,6 millones de euros.
Según se apuntó, el único compromiso es que las obras continúen “permanentemente” en el Espacio Torner, museo ubicado la en la antigua iglesia de San Pablo, junto al Parador de Turismo.
El Ayuntamiento no se compromete a realizar ninguna aportación económica por esta donación, pues lo contrario era desaconsejado por distintos informes dada la deficitaria situación económica de las arcas municipales, aunque hay que recordar que el Espacio Torner arrastra problemas de financiación desde su apertura inicial, en diciembre de 2004, lo que llevó a su cierre entre finales de 2011 y primeros de 2016.
Los grupos de la oposición sí criticaron al equipo municipal que el alcalde, Ángel Mariscal, y la concejal de Cultura, Marta Segarra, entraran a formar parte de la Fundación de carácter privado que gestiona el museo con anterioridad a la aceptación de esta donación, pues entienden que su pertenencia a ella puede comprometer económicamente al Consistorio con el mantenimiento del museo, cuyo coste ronda los 110.000 euros anuales.
Gustavo Torner
Nacido en Cuenca en 1925, Torner es pintor y escultor y artista autodidacta, integrante, junto con Gerardo Rueda y Fernando Zóbel, de la llamada ‘escuela conquense’. Esta corriente, recuerda el Gobierno central, constituyó “una de las primeras iniciativas de introducir en España las nuevas corrientes del arte moderno en la década de 1960, actividad que prosigue la fundación del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca”. Cofundador de este museo y miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Torner también posee la Gran Cruz de Isabel La Católica, la Encomienda de Alfonso X el Sabio, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, entre otras muchas otras distinciones.
