El Vicerrectorado del Campus de Cuenca acogió este jueves la presentación de Vidartis, un proyecto castellanomanchego que aúna arte y agricultura con la utilización del mosto como pigmento en diferentes técnicas de expresión gráfica.
El proyecto Vidartis nació en el departamento de innovación de la bodega Julián Soler S.A. con el objetivo de aportar valor al mosto concentrado. El colorante natural de la uva se utiliza como pigmento en diferentes técnicas de expresión gráfica, consiguiendo crear una línea artística original e innovadora, que conecta al espectador con un producto tan castellanomanchego como nuestras propias raíces.
Vidartis ha comenzado su andadura en octubre de 2021, mediante la puesta en marcha de un proyecto de investigación con la UCLM, coordinado por el profesor Ramón Freire Santa Cruz y en el que una selección de 14 alumnos de la Facultad de Bellas Artes de Cuenca utiliza dicho producto como pigmento.
Para ello, todos han recibido un kit con diferentes elementos como hojas de la viña, tierra de cultivo, sarmientos y estratos de uva tinta, blanca y garnacha tintorera donados por la empresa Julián Soler.
Los artistas que inicialmente participan en este proyecto tienen raíces manchegas y una fuerte vinculación con Castilla-La Mancha.
Posteriormente, en mayo de 2022, y como colofón al curso, se entregará el ‘Premio Julián Soler’ a la mejor de las obras desarrolladas por los alumnos y se inaugurará una exposición en Cuenca.
“Se trata de un proyecto distinto que nos hace especial ilusión y en el que hemos volcado grandes esperanzas, tanto por la parte de la Universidad, como por la del sector privado y por quien ha ayudado en la canalización de este. Vidartis es un proyecto que mezcla, por un lado, lo que nosotros podemos aportar al mismo desde esta Facultad de Bellas Artes de Cuenca, que es el talento de nuestros alumnos y profesores, con uno de los productos más importantes de nuestra tierra como es la vid”, destacaba el vicerrector del Campus de Cuenca, César Sánchez Meléndez, durante la presentación del proyecto.
“Desde el primer momento nos pareció muy interesante porque unía dos sectores que desde siempre habían estado muy diferenciados, como son el agrario alimentario y el artístico y cultural. Vimos que se trataba de apoyar, tanto a los productos de nuestra tierra, en este caso la uva y el mosto, como a los estudiantes. Por eso decidimos empezar esta colaboración, con Vidartis y la empresa Julián Soler, a través de este proyecto de investigación universitario y eso no hace estar muy orgullosos. Seguro que van a salir cosas muy bonitas de aquí”, indicaba por su parte Henar de la Sierra, directora de la Fundación Globalcaja.
El profesor Ramón Freire Santa Cruz también hacía hincapié en la ilusión que supone este proyecto: “Nada más conocer la idea me pareció muy interesante porque pone en valor un producto esencial castellanomanchego como es el mosto. Y rápidamente nos pusimos a trabajar para darle un desarrollo importante. A través de la materia prima del mosto lo que vamos a intentar es tratar de generar un pigmento que permita trabajar con él y eso se basa en una investigación y en unas técnicas, tanto envejecimiento de la uva para ver el deterioro o la temporalidad y supervivencia que tiene ese pigmento y su viabilidad a efectos de secado, transparencia, viabilidad, reporte en diferentes soportes”.
“Vidartis nace dentro de Julián Soler como proyecto de responsabilidad social con nuestra comunidad, Castilla-La Mancha. A través del mismo aunamos dos conceptos que parecen antagónicos entre sí, como son la agricultura y el arte, uniéndolos mediante la utilización del mosto como pigmento, a través de diferentes técnicas de expresión gráfica. Hoy ponemos nuestra querida uva en vuestras manos investigadoras y creadoras, para convertirla en algo único, innovador y embajador de nuestra tierra. Un tipo de arte que conecta al espectador con nuestras raíces, con las de la cultura castellanomanchega. Espero con ilusión que juntos lo consigamos”, subrayaba por su parte Ana Soler Sanchiz, directora de Vidartis.