Documentos notariales y judiciales, expedientes de milicias y reclutamiento de soldados, reales órdenes y hasta una escritura de compraventa de unas tierras por doce mil maravedíes que data de 1570. Todos ellos son documentos de alto valor histórico que la Guardia Civil ha entregado hoy en el Archivo Histórico Provincial de Cuenca.
Manuscritos de los siglos XVI al XX, procedentes en su mayoría de la de la localidad conquense de Leganiel y de algunos pueblos colindantes, que en julio del año pasado aparecieron en un portal de Internet para su venta. “Localicé estos documentos en julio de 2024, me puse en contacto a través de Guardia Civil con la UCO y colaboré con ellos todo lo que pude”, relata Guillermo Fernández, oficial de la Policía Local de Alcalá de Henares y cronista oficial de la localidad de Villas de la Ventosa. Fernández, conocedor de este tipo de documentos, dio la voz de alarma que permitió su localización. “Y por fin, toda esta documentación está donde tiene que estar, que es en el archivo, y para mí es un orgullo haber podido participar en esto”.
La prioridad fue salvar todo el conjunto documental y no perder el testimonio escrito “que constituye la historia del pueblo y sus habitantes” de donde se puede obtener una visión histórica de la sociedad de la época. Para el capitán de la Guardia Civil, y jefe de la Sección de Patrimonio Histórico de la Unidad Central Operativa (UCO), Juan José Águila, la principal satisfacción es la devolver su historia al pueblo de Leganiel. “Para la Guardia Civil el objetivo siempre es la restitución y es un objetivo conseguido en este caso porque devolvemos los documentos que constituyen la historia de esta zona. Si aparecen puestos a la venta en Internet, como ha sido el caso, es una ventana para que los expertos den la voz de alarma”.
El portal de Internet, afirma Juan José Águila, colaboró con la Guardia Civil y se pudo identificar al “poseedor”. “Los portales de venta colaboran muchas veces con nosotros y nos permitieron identificar al poseedor, que no propietario, que por suerte tenía un importante archivo documental reunido y no diseminado. En este caso el señor colaboró y entregó los documentos voluntariamente”, afirma Águila.
Todo apunta a que los documentos estaban en manos de una familia noble de la zona. “Esa familia es la que atesoraba los documentos. Es habitual que los documentos se hereden y que los herederos no le den el valor que en realidad tienen. Muchas veces es el desconocimiento de la ley el que hace que se deshagan de ellos porque no tienen ningún interés más allá del económico”, asegura el capitán Juan José Águila, para quien fue una suerte que “el poseedor tuviera todo reunido y pudiéramos intervenir”.
Para el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, con esta operación “gana la ciudadanía” porque se trata de un patrimonio histórico antiquísimo. “Estamos hablando de un alto valor, sobre todo histórico, que aporta muchísima información. Hoy gana la ciudadanía porque los documentos están donde tiene que estar, en los archivos, que cumplen la función de custodia, conservación y también de futura labor investigadora”, ha destacado.
Desde 2020 se han depositado en los archivos y museos de la región más de 600 documentos, de los que 253 están depositados en el Museo Provincial de Cuenca.