El alquiler de trasteros, una tendencia en auge en Cuenca

La falta de espacio en unas viviendas cada vez más pequeñas está impulsando el alquiler de trasteros principalmente en grandes poblaciones como Madrid y Barcelona aunque la tendencia también está en auge en ciudades de menor tamaño como Cuenca, tanto para empresas como para ciudadanos de a pie.
Así lo explica Paola Beltrán, delegada en la capital conquense de la firma Necesito un trastero, un negocio que echó a andar hace un año en la capital conquense y que cuenta con una demanda creciente.
En este tipo de negocio, que es muy común en otras partes del mundo como Estados Unidos y Reino Unido pero que se está extendiendo cada vez más por todos los países, destacan sobre todo dos modelos de funcionamiento: el formato de guardamuebles de tamaño medio situados en las afueras de las ciudades y otro de trasteros urbanos más pequeños y ubicados dentro de las poblaciones, que es el que ofrece esta firma en la capital conquense.
TIPO DE CLIENTES
“Todo el mundo necesita un trastero”, considera la delegada, aludiendo a esa falta de espacio cada vez más frecuente en las viviendas actuales y que hace que la tipología de su clientela sea muy diversa: desde personas que lo utilizan para hacer el cambio de ropa estacional hasta coleccionistas de diferentes tipos, pasando por los que guardan enseres de Semana Santa o de aficiones varias como la pesca y profesionales autónomos que almacenan sus herramientas en estos trasteros.
Además, también cuentan entre su clientela con empresas que, en lugar de alquilar un local, que sería más costoso, se decantan por un trastero para contar con un pequeño centro de almacenaje a un precio más económico.
Y en una ciudad como Cuenca también hay entre los clientes estudiantes universitarios del Grado de Bellas Artes que van a regresar al curso siguiente a Cuenca y dejan el piso en verano, guardando durante las vacaciones en estos habitáculos lienzos o pinturas, entre otro material, en lugar de llevárselo a sus respectivos hogares familiares.
Y una curiosidad de estas fechas navideñas: hasta hay gente que los tiene alquilados para otros fines y aprovecha para esconder en este espacio hasta los regalos de los Reyes Magos.
La falta de espacio en unas viviendas cada vez más pequeñas impulsa este negocio, explican desde la firma Necesita un trastero, que cuenta con un centro en CuencaPROCEDENCIA
Debido a esa variedad, el barrio de residencia de sus clientes también es muy diverso aunque sobresalen en número los que proceden de zonas cuyas viviendas no cuentan por lo general con trasteros como, por ejemplo, podrían ser la céntrica Carretería, las inmediaciones de Reyes Católicos y el Pozo de las Nieves.
“Nuestros trasteros tienen muchísima demanda y hay bastante rotación”, cuenta Beltrán, que se dedica profesionalmente al alquiler inmobiliario y decidió adentrarse en este negocio para diversificar.
DIVERSOS TAMAÑOS Y PRECIOS
El local, que está ubicado en el número 17 de la calle Hermanos Becerril de Cuenca, dispone de más de cuarenta trasteros de diversos tamaños, con una superficie que oscila entre 1,5 y siete metros cuadrados. En cuanto al precio, el coste ronda los 20 euros por metro cuadrado.
La firma Necesito un trastero –que cuenta con cerca de un centenar de sedes en todo el país, cinco de ellas en Castilla-La Mancha– ofrece a los clientes acceso a los centros de almacenaje mediante huella dactilar (también se puede entrar con llave convencional) las 24 horas durante los 365 días del año y cuenta con videovigilancia para garantizar la seguridad del material almacenado.
La delegada de esta firma en Cuenca también hace hincapié en las facilidades de aparcamiento que ofrecen, contando el local con un vado que facilita la descarga de las pertenencias. Además, se puede alquilar sin obligación de permanencia y no se requiere abonar una fianza.