Coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Riñón, ALCER ha dado a conocer que número de enfermos renales en la provincia de Cuenca se ha incrementado en los últimos años hasta situarse en cerca de 350 personas lo que supone una subida de la prevalencia del 38%, siendo más de 100 los pacientes que reciben tratamiento de hemodiálisis con las complicaciones que ello conlleva (restricciones alimenticias, transporte sanitario,…)
Así lo ha puesto de manifiesto el presidente de ALCER Cuenca, Clemente Gómez, quien incide en que la ciudadanía en general debe empezar a darle importancia a la enfermedad renal y saber cómo prevenirla.
Del total de afectados en la provincia, el 68% son hombres y el 37% mujeres, con una edad media de 66 años.
Con motivo del Día Mundial del Riñón que se celebra este jueves, la asociación conquense ha instalado una mesa informativa en El Mirador, con el objetivo de hacer una llamada de atención a la población.
“Al igual que todo el mundo se preocupa por el colesterol o se hace chequeos generales de salud, debemos empezar a saber lo que es la creatinina y lo importante que es preguntarle a tu médico que tal están tus riñones”, apostilla.
Y es que recuerda que los riñones están trabajando 24h al día, y “nunca les damos la importancia que realmente tienen, son esenciales para nuestra salud”.
Para sensibilizar a la población, a lo largo de la mañana, en las inmediaciones del supermercado Carrefour, dentro del Centro Comercial El Mirador, ALCER Cuenca realizará tomas de tensión gratuitas y se informará del grave problema de salud que supone la Enfermedad Renal Crónica (ERC).
También desde los colegios de la provincia de trabajará el tema de la salud renal difundiendo dibujos con mensajes saludables (los cuales también se pueden descargar desde las redes sociales de la asociación) para que los niños se los lleven a casa y aquellos que envíen una foto de los mismos a ALCER entrarán en el sorteo de 3 vales de 20€ en material deportivo.
Todo como forma de promover y potenciar la prevención de una enfermedad que ya afecta a un 10-15% de la población adulta en España, pero que sigue siendo poco conocida para la mayoría de la sociedad.
El crecimiento de ERC se relaciona con factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular (responsables de un 40% de los casos), la obesidad, la hipertensión arterial o el tabaquismo, que en su mayoría podrían evitarse o prevenirse con la adopción de unos hábitos de vida saludables, lo que permitirían frenar su avance.
A ello hay que unirle que es una patología que en sus estadios iniciales presenta síntomas poco reconocibles, y que cuenta con infradiagnóstico que supera el 40%. De ahí, que destaquen la importancia de realizar un mayor esfuerzo en las etapas previas de la ERC, es decir, en prevención y diagnóstico precoz, aunando la colaboración de la Atención Primaria y otras estrategias que mejoren el tratamiento y la calidad de vida de las personas con esta enfermedad”,.
Por todo ello, tanto profesionales sanitarios como enfermos en este Día Mundial del Riñón, que ese celebra bajo el lema “Preparándonos para lo inesperado, apoyando a los vulnerables”, reclaman un plan nacional de prevención y diagnóstico precoz como forma de frenar el avance de la enfermedad.
Además piden otras medidas imprescindibles para avanzar en la mejora del tratamiento y la calidad de vida de las personas con patologías renales, en especial las que sufren ERCA y tienen que someterse a tratamiento renal sustitutivo (TRS), es decir, diálisis o trasplante para reemplazar la función de sus riñones y poder seguir viviendo.
En concreto, el fomento de la donación de vivo como opción segura y eficaz para el trasplante renal, con resultados que son mejores que los del donante fallecido en términos de supervivencia del trasplante y reducción de complicaciones; y la potenciación de los tratamientos domiciliarios, como la diálisis peritoneal o la hemodiálisis domiciliaria, que permiten una mayor autonomía e independencia del paciente al realizarlo en su propia casa, evitando desplazamientos al hospital y facilitando su conciliación laboral y familiar, además de contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario.