Remontes
El alcalde propone dos soluciones a la accesibilidad del Casco: Cuenca IN+AIR y la nueva tirolina
El alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, ha presentado los trabajos de remonte mecánico que ha llevado a cabo -hasta ahora en secreto- el prestigioso arquitecto francés, Jaques Nouvell. El proyecto pretende la realización de un ascensor en la zona de la calle Canónigos y, de aquí la novedad, una pasarela que discurriría sobre la calle Obispo Valero hasta la plaza Mayor, lugar donde se ubicaría un segundo ascensor.
En una exclusiva que recoge el portal hombredepalo.com, se detalla que este proyecto personal del alcalde uniría la deseada accesibilidad a la ciudad antigua con las posibilidades turísticas de una visita sobre las cubiertas de las edificaciones, algo único en conjuntos patrimoniales de este tipo. Por ello ha unido el IN de las propuestas ya conocidas, con el AIR derivado de sus posibilidades contemplativas desde esta posición privilegiada.
Las reacciones de los organismos afectados aún no se conocen. El colectivo “Cuenca (in) accesible” guarda un prudente silencio por haber sido claramente sobrepasado por esta propuesta, mucho más ambiciosa, que hoy conocemos. El portavoz de la Junta de Comunidades también ha declinado hacer comentarios a raíz de apoyo incondicional que hoy también se ha hecho público del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos). Debemos recordar las reticencias de este mismo organismo de la Unesco a las anteriores propuestas.
TIROLINA
También el primer edil inauguraba en la tarde de ayer la Tirolina de San Pablo: una alternativa eficaz, sostenible, de bajo coste, divertida y novedosa que viene a paliar las demandas vecinales para mejorar la accesibilidad a Cuenca, según él mismo comentó. De nuevo el regidor toma la delantera a la Junta de Comunidades en este tema.
La nueva instalación, ha comentado el regidor, se unirá este año al programa de Turbas, para incluirse como variante en la Procesión del Calvario, lo que supondrá un nuevo atractivo turístico.
Los ecologistas han criticado la falta de consenso y consulta, el tendido de cables podría afectar seriamente a la población de cernícalos y alimoches de la Hoz del Huécar. También el gremio de los hosteleros del casco antiguo se ha manifestado en contra, ya que la “tirolina remonte” solo asegura el descenso, es decir la salida del casco, a lo que el alcalde ha manifestado que se trata de un mal menor y que están estudiando los expertos, y esperan subsanarlo en breve.