Abrazos y palabras de cariño al cielo para los fallecidos por la Covid

Medio centenar de globos han llevado abrazos y palabras de cariño desde el Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha hasta lo más alto del firmamento para honrar la memoria de las personas fallecidas a causa de la Covid-19, toda vez que este domingo la asociación de afectados y familiares por la Covid-19 de Castilla-La Mancha ha llevado a cabo este emotivo acto coincidiendo con el quinto aniversario de la declaración del estado de alarma.

El acto, presidido por la presidenta de la asociación, María José Saiz, arrancaba con unas emotivas palabras de Javier Semprún, director del MUPA, quien ha detallado que este domingo un nuevo olivo honra la memoria de quienes nos dejaron durante la pandemia. Y es que, el ejemplar plantado en 2021, se había secado como consecuencia de la hiedra.

“Este nuevo ejemplar tiene más de 300 años y queremos que sea un ejemplo de resiliencia y recuerdo, con una nueva misión de honrar a quienes ya no está”, ha enfatizado. Saiz, durante su intervención, ha exigido la constitución de una comisión de investigación. “Fallaron muchas cosas en la gestión sanitaria”, ha reclamado.

En esta línea, ha asegurado que “una buena gestión de la pandemia hubiera evitado muchas muertes”. Respecto al olivo, cuando vio que se había secado, llegó a pensar que los recuerdos también podrían marchitarse, pero gracias a la donación de la cooperativa de Villalba del Rey, los fallecidos por la pandemia tienen un nuevo ejemplar que les rinde memoria.

“Gracias por replantar la esperanza, porque recordaros es la única manera de detener el tiempo para honrar a quienes se fueron en soledad, y con este nuevo olivo queremos que nadie se olvide de su paso por la vida”, ha expresado visiblemente emocionada. Saiz ha reivindicado que los familiares “son el corazón de esta lucha, y cada dolor y lágrima ha sido un acto de valentía a pesar de que a veces parece molestar que recordemos lo vivido”.

Al mismo tiempo ha dejado claro que las víctimas de la Covid-19 “no son un número, tienen nombres y apellidos, y nosotros seremos siempre su voz y recuerdo”. Así, ha asegurado que “mientras que el tiempo nos lo permita, seguiremos deteniendo el tiempo para mantener viva la llama y su recuerdo”.

En el acto homenaje también han estado presente el delegado de Sanidad de la Junta en Cuenca, Chema Pastor, quien ha asegurado que “a todos se nos hace un nudo en la garganta” recordándoles. Ha tendido la mano a la asociación para que este homenaje se desarrolle de forma anual, “porque es necesario mostrar dignidad y respeto a quienes se fueron esos días”.

Ha recordado lo complicado de trabajar en esos meses, destacando la ola de solidaridad que se produjo. “Cada uno aportó lo que pudo”. También ha tenido palabras de agradecimiento hacia los profesionales sanitarios, “quienes cada día se jugaron la vida para salvar al mayor número de personas”. “No podemos permitir que esto caiga en el olvido, y merecéis toda la dignidad del mundo y el apoyo de las instituciones, y aquí tenéis la del Gobierno de Castilla-La Mancha”, ha enfatizado Pastor.

Por último, ha mostrado su respeto hacia todo el personal sanitario, “que estuvo a la altura de las circunstancias y pusieron su vida a disposición de las demás”. En el acto también ha intervenido Fernando Huete, vicepresidente de la cooperativa de Villalba del Rey, quien ha asegurado que no dudó ni un momento en colaborar con el MUPA para mantener vivo el recuerdo de los fallecidos por la pandemia.

Por último, se ha leído con música de violín de fondo el nombre de numerosas víctimas de la región cuyo nombre ha sido autorizado por las familias, y también se ha guardado un minuto de silencio. Del mismo modo, se ha enterrado una caja con los discursos leídos durante la mañana así como frases emotivas que los familiares habían escrito.