Su generación es nativa digital pero muchos desconocen los peligros a los que se enfrentan en la red. Aunque Daniel, Rober, Alina y Pablo, alumnos del colegio San Fernando de Cuenca de tan solo 12 años, se han convertido en unos auténticos ciberexpertos: son conscientes de los riesgos que entrañan las nuevas tecnologías pero también conocen las herramientas que pueden facilitarles una navegación más segura.
Estos pequeños forman parte de los cerca de 250 alumnos de sexto curso de Primaria de centros de Cuenca que han participado este curso en el programa Ciberexpert@, formación impartida por la Policía Nacional en todo el país sobre el uso seguro de internet. La iniciativa se desarrolla por tercer año consecutivo en la capital y durante este tiempo se ha formado a casi 600 estudiantes.
“Ha sido muy interesante. Seguro que nos sirve para poder defendernos en las redes”, dice Daniel. “Hay que tener mucho cuidado con las nuevas tecnologías”, reconoce por su parte Alina.
Estos niños, que han recibido su carné de ciberexperto, detallan que tienen perfiles en Instagram y en páginas de videojuegos. Aunque destacan la aplicación de mensajería WhatsApp, donde confiesan que están “todo el día conectados”. No obstante, Rober asegura que desde el curso intenta usarlo “con más moderación”.
Y la formación no solo les ha servido a ellos: los que tienen hermanos más pequeños relatan que, tras la formación de ciberexpertos, les han dado consejos para advertirles de los peligros de las nuevas tecnologías y “para que tengan cuidado al meterse en determinadas páginas”.
Identidad y privacidad digital, netiqueta (buenos modales en internet), redes sociales, ciberacoso, grooming (engaño pederasta a través de las nuevas tecnologías), sexting (envío de mensajes de naturaleza sexual), tecnoadicciones, suplantación de identidad y contenidos inapropiados y comunidades peligrosas son algunos de las cuestiones que se han abordado con los niños.
Consuelo Martínez Sahuquillo, delegada de Participación Ciudadana de la Comisaría Provincial de Cuenca, ha sido la encargada de la formación, que tiene una duración de unas diez horas lectivas, en sesiones de una hora semanal. A su término, los alumnos han realizado un pequeño test final de conocimientos.
La responsable explica que se eligió trabajar con los alumnos de sexto curso porque suele ser sobre esas edades cuando ellos se introducen de lleno en las nuevas tecnologías y con esta formación se intenta que estén más preparados para evitar riesgos.
Es también a esos años cuando suelen tener su primer móvil. Precisamente Martínez Sahuquillo explica que una de las preguntas más frecuentes de las familias (con las que también desarrollan charlas a través de las asociaciones de padres y madres) es acerca de la edad recomendada para comprar un móvil a sus hijos. “Depende de la madurez del niño”, señala esta profesional, aunque pone en duda que realmente les hagan falta. “Lo que sí se necesita es una educación digital, tanto los menores, que son nativos digitales, como los adultos”, reclama.
“Un Smartphone no es un juguete, es una herramienta peligrosa. Con él se pueden cometer delitos y ser víctimas de delitos”, añade. “Los padres se sorprenden en las charlas porque realmente no son conscientes de los peligros a los que están expuestos sus hijos”, cuenta.
Aunque es difícil valorar los resultados de la formación puesto que es preventiva, la responsable está muy satisfecha con la respuesta de los alumnos y apunta que desde que se está desarrollando el programa ‘solo’ se ha registrado un caso de grooming en Cuenca, justamente este año.
La primera denuncia en la capital por este delito se detectó hace una década. “Nos impactó mucho”, indica, recordando que fue a partir de 2009 cuando se empezaron a detectar los primeros problemas en las redes.
El ciberacoso es frecuente, según señala, y también se han encontrado casos de suplantación de identidad. Dice que no hay denuncias por mal uso del sexting pero saben que es una práctica que los menores utilizan. “Intentamos formarlos. Tienen que ser conscientes de que se pierde el control de todo lo que se envía” .
Divertidos avatares
Para intentar acercarse a los niños y hacer atractiva la formación, el programa de Ciberexpert@ cuenta con dos personajes muy especiales: Paz y Max, una policía y un agente muy coquetos que los pequeños pueden utilizar como avatares en sus perfiles de redes sociales para preservar así su identidad.
