La conexión “recta” con el AVE reduciría la distancia a 2 kilómetros
Durante la pasada legislatura, en el Partido Popular aseguraron en varias ocasiones que la estación del AVE, a unos cinco kilómetros del centro de la capital, se encuentra, en realidad, a apenas un kilómetro de distancia. Aunque, para ello, sería necesario construir un vial recto entre la estación y el centro que propiciara un importante “atajo” con respecto a la distancia actual.
En un pleno celebrado en julio de 2018, el entonces concejal de Servicios a la Ciudadanía, Pedro J. García Hidalgo, apuntó que se trataría de un vial de 43 metros de ancho y dos carriles por sentido, además de un carril bici, cuyo coste rondaría los 10 millones de euros.
Y ahora que el PP está en la oposición y Pedro J. García Hidalgo ha dejado de ser concejal, ha ofrecido algunos datos más sobre ese supuesto vial recto a través de su blog personal, “Apuntes Liberales”, con vistas a que “si el nuevo alcalde lo cree conveniente, pueda tenerlo en cuenta. Para nosotros ha sido imposible pero quizá ahora, si las condiciones de todo tipo mejoran, se podría acometer”, escribe.
Según señala, fue en 2016 cuando encargó al jefe del servicio de Obras del Ayuntamiento, Ángel Leiva, un informe para conectar la ciudad con la estación. Y la propuesta es una vía de 2.014 metros de longitud, el doble de lo sostenido por el PP en la pasada legislatura, pues situaría la estación no a un kilómetro de distancia, sino a dos, aunque la reducción sería importante con respecto a los cinco actuales. Dicho vial conectaría el paso elevado sobre el ferrocarril del entorno de San Fernando con la glorieta que enlaza la N-420 con la estación del AVE, discurriendo principalmente por terrenos de tierra, algunos ocupados por huertas.
CALZADA DE 7 METROS
El vial contaría con dos calzadas de siete metros, cada una con dos carriles de 3,5 metros. El ancho total de la plataforma alcanzaría no obstante los citados 43 metros, pues habría que añadir, entre otras cosas, dos metros para la mediana, tres para la acera, otros tres para el carril para bicicletas y otro para una jardinera.
El coste de la obra alcanzaría los 9,5 millones de euros y la obra podría llevarse a cabo en 18 meses.
El que fuera concejal del PP añade que, precisamente por reducir la distancia del centro a la estación del AVE, la empresa que gestiona los autobuses tendría un ahorro de 24.600 kilómetros al año en la línea 1 que comunica la estación con la Plaza Mayor, “lo que facilitaría llevar esos kilómetros a otras zonas de la ciudad”, aunque también se podrían destinar a mejorar la frecuencia de esta línea.
El Ayuntamiento de Cuenca, con una deuda de 60 millones de euros, difícilmente podría asumir una inversión de estas características salvo en colaboración de otras administraciones o fondos europeos. Algo de lo que es consciente el propio García Hidalgo.“Para llevar a buen puerto este necesario proyecto es imprescindible un acuerdo político municipal y su financiación con la participación de todas las administraciones”, sostiene.
En tiempos de José Manuel Martínez Cenzano y de Francisco Javier Pulido ADIF propuso una vía de doble sentido para enlazar la ciudad con la estación y el Ayuntamiento hablaba de un boulevard, incluso de un monorail que permitiera poner en marcha un tranvía con capacidad para cerca de cien pasajeros, pero la crisis económica paralizó los proyectos y el AVE llegó a Cuenca en diciembre de 2010 con la estación a cinco kilómetros del centro y una carretera de acceso “tercermundista”, la N-420, llena de curvas y mal iluminada.